El juego busca alejarse del título de Microsoft siendo un juego más serio tratando de crear una experiencia bastante ligada a la simulación sin dejar de lado todo lo arcade creando un equilibrio bastante notable. Durante una gran cantidad de pistas (y no tanto de vehículos) debemos conseguir las mejores puntuaciones para subir de nivel nuestro perfil de jugador y otorgar puntos a nuestro club, que básicamente es lo que da forma a este juego.
Si estamos familiarizados con los juegos de autos, este es un nuevo inicio ya que aquí debemos aprender a conducir de nuevo. Sentimos los autos (tendremos alrededor de 50 desde autos básicos hasta super autos) bastante pesados y sufren en cada curva, debiendo no sólo calcular, sino desarrollar y mejorar nuestra forma de jugar y este es un punto a favor, ya que nos veremos beneficiados al tomar bien una curva o pagaremos el precio incluso por salirnos de esta.
Este juego trata mal a los nuevos jugadores pero la sensación de adrenalina y velocidad de dominio compensa gratamente al jugador y mejor aun cuando desbloqueemos más autos, aquí no los compraremos con nuestros puntos si no, los desbloqueamos conforme subamos de nivel a nuestro perfil.
En el juego todo gira alrededor de los clubs, que quiero decir,al pertenecer a un club tendremos retos y en verdad mejora la experiencia. Al estar en un club podremos desbloquear autos exclusivos y poder aplicar los colores exclusivos de nuestro club en nuestro auto favorito. Existen muchas competiciones online creadas por la comunidad de jugadores y están enfocadas mucho al jugador y a los clubs, ya que en base a esto podemos tener interesantes retos entre clubs para poder escalar en el ranking de los mejores clubs del juego. La única parte a criticar es que cada club tiene un número limitado de 6 miembros, esto personalmente lo veo como un punto negativo.
MINUCIOSO REALISMO
Los escenarios son bastante vistosos y lucen increíbles pudiendo crear tomas bastante realistas con el botón “Share” (en un futuro tendremos el Photo Mode ya clásico en los juegos exclusivos de PlayStation).
La personificación en los autos brilla por su ausencia y esto es algo que a varios jugadores (por no decir la gran mayoría) no les ha gustado para nada. Todos queremos modificar el auto, cambiarle las llantas o cualquier otra cosa que haga una carrera más accesible para nosotros pero esto no existe, lo único que podemos modificar son los colores del auto pero no es suficiente, incluso los colores son muy limitados y la forma de modificar los colores es tan básica que tranquilamente se pudo haber omitido y nadie lo hubiera extrañado.
Muchos criticaron que el juego no se pueda conectar a internet en sus primeros días, nosotros tuvimos el juego días antes de su lanzamiento, pudiendo probar todas sus ventajas y entendemos las quejas de los usuarios, estar conectado a internet te da muchas comodidades y es vital para tener una experiencia de primer nivel en este juego. Al estar conectado podemos tener pequeños retos dentro de una carrera contra jugadores desconocidos, intentando conseguir un mayor puntaje en cierta actividad y sobrescribir su logro, esto es algo que motiva a la competitividad y vida del juego.
Hablando del sonido del juego, no encontraremos variedad en las melodías de las pistas (y eso que están desactivadas de forma predeterminada) por lo que pasa por alto, pero donde tiene mayor ventaja respecto a otros juegos son los sonidos, tanto del auto como de los choques o curvas, siendo un punto donde no tiene rival. En un futuro, nos han prometido los climas dinámicos y aunque tenemos climas ya predeterminados, este es un añadido que se hace esperar.
Driveclub no es el juego perfecto de conducción pero nos da una opción bastante agradable, siendo un juego que mejora con el pasar de las horas. Con más aciertos que decepciones este es un título de conducción que tú, amante de los autos, no puedes dejar pasar.
