Durante años, la cronología y los vínculos que unían a las diferentes historias narradas a través de las múltiples entregas de la popular franquicia “The Legend of Zelda” fueron temas de debates bastantes apasionados entre los fanáticos. Con el lanzamiento de una línea temporal oficial, estructurada y confirmada por Nintendo, muchos creyeron que la historia había sido descifrada y que cada nuevo juego que fuera lanzado tendría que encontrar la forma de integrarse dentro de aquella línea temporal, evitando entrar en contradicciones o creando hoyos argumentales. Resulta que estaban todos equivocados.
El lanzamiento del más reciente material coleccionable del título “Breath of the Wild”, un artbook que además incluye comentario y entrevistas con los desarrolladores del juego, ha confirmado las sospechas de muchos jugadores que afirmaban que la historia de la entrega no puede ser ubicada en la línea de tiempo sin crear inconsistencias o problemas con la continuidad de los hechos. Según declaraciones del famoso productor Eiji Aonuma, Breath of the Wild no tiene un lugar confirmado en la línea de tiempo y nunca lo tendrá.
El enfoque del juego era el de regresar la franquicia a sus orígenes, cuando en la época de los 8-Bits, el jugador debía navegar sin un camino predeterminado por un escenario desconocido y conquistar retos en el camino sin tener una línea pre-establecida del orden de los acontecimientos en los que se iba a ver involucrado nuestro protagonista. Breath of the Wild le permite al jugador vivir la historia a su manera, eligiendo cuándo, cómo y de qué manera enfrentarse a los obstáculos en su camino, cumplir misiones, recolectar recursos o avanzar la historia. Esta libertad es la que el equipo de Aonuma trató de extender hasta la historia, dejando que el jugador interprete la trama de la manera que mejor crea conveniente, sin limitar su imaginación ni expectativa al decirle que la historia debe verse de una sola forma para poder encajar dentro de una línea de tiempo.
Es por esta razón que Nintendo prefirió mantenerse vago ante las interrogantes de los fanáticos con respecto al lugar que ocupa Breath of the Wild en el universo de Zelda. Aonuma declara que ha podido observar al público disfrutando de la inclusión de referencias, cameos y secretos que permiten encontrar un poco de cada título de la saga dentro del juego. El objetivo es que los jugadores puedan divertirse expandiendo su interpretación del juego con su imaginación, creando posibles escenarios que sucederían incluso luego de haber acabado con la campaña principal.
